Sonriente y de buen humor, Silvia Pinal reapareció ante los medios previo a su cumpleaños, la gran diva del cine mexicano estaba rodeada de sus tres hijos, Sylvia Pasquel, Alejandra Guzmán y Luis Enrique Guzmán, quienes la acompañaron mientras se le cantaron «Las mañanitas».
La actriz se mostró feliz y bromista cuando la prensa la cuestionaba sobre este día tan especial que lo festejó en su hogar con chiles en nogada y pastel, así lo reveló su hija Alejandra, quien le cantó «Eternamente bella».
Pinal dijo que celebrara un cumpleaños más, eso sí, dejó claro algo:
«A mí no me asusta la muerte, la muerte se va, se va y viene cuando a ella le da su gana», expresó la actriz de la Época de Oro del cine mexicano, quien una vez más estuvo rodeada de micrófonos mientras se encontraba en una silla de ruedas.
La diva recibió regalos por parte de sus hijos que usará en el invierno que está por llegar, pues sus hijos le regalaron pijamas, calcetines, chalinas y un cobertor calientito.
«La amamos, la queremos, es para nosotros un orgullo, una inspiración, un ejemplo», expresó Pasquel.
Con humor, Silvia Pinal dijo que se sentía de 18 años, y para sus fans mandó un mensaje de que «tengan paciencia» y huyan de las peleas.
La edad de Silvia Pinal
Previo a que Silvia Pinal saliera de su casa a saludar a la prensa, su hijo Luis Enrique Guzmán dijo que su madre «pudo haber cambiado su acta de nacimiento», por lo que no saben exactamente cuántos años tiene, pero calculan que cumple 94.
“No sabemos qué edad tiene bien bien bien, pero calculamos que 94”, expresó sonriente y reveló que el festejo de cumpleaños se adelantó un poco porque a la mayoría de los invitados se les facilitaba hacerlo ayer.
Recordó que tuvo una niñez feliz y cercana a su mamá, a diferencia de sus hermanas, cuando la diva estaba en el arranque de su carrera artística; Silvia Pinal nació en la ciudad de Guaymas, en el norteño estado de Sonora, es considerada una de las grandes de la época de oro del cine mexicano.
Uno de los aspectos más impactantes de la carrera de Pinal es su amplia interpretación de papeles protagonistas y grandes personajes, en una industria en la que estos terminaban cuando las mujeres cumplían 40 años.
Durante parte de su carrera, trabajó con el cineasta español Luis Buñuel, con quien rodó películas como «Viridiana» (1961) -el papel «más importante de mi carrera», según ha dicho en varias ocasiones y con el que ganó la Palma de Oro en Cannes-, además de «El ángel exterminador» (1962) y «Simón del desierto» (1965).