Estados Unidos y México han anunciado nuevas medidas para frenar la entrada de acero y aluminio provenientes de China y otros países a territorio estadounidense sin el pago de aranceles.
En una declaración conjunta, los presidentes de ambos países destacaron que estas normas buscan «proteger los mercados norteamericanos del comercio desleal».
Ambos países implementarán políticas para prevenir la evasión arancelaria en estos metales y fortalecer las cadenas de suministro en América del Norte. México exigirá a los importadores más información sobre el origen de los productos y aumentará los aranceles a las aleaciones provenientes de países sin tratado de libre comercio.
Por su parte, Estados Unidos aplicará requisitos de fundido y colado para ciertas importaciones de acero y aluminio de México, permitiendo la entrada libre de aranceles solo si se documenta que el metal ha sido fundido en México, EE.UU. o Canadá.
Las importaciones que no cumplan con estos requisitos enfrentarán aranceles del 25% para el acero y del 10% para el aluminio.
EE.UU. y México endurecen medidas para frenar entrada de acero y aluminio chino
Estas acciones abordan un vacío legal que permitía a China evitar aranceles enviando productos a través de México. Lael Brainard, asesora económica de la Casa Blanca, declaró que esta práctica socavaba las inversiones y perjudicaba a los trabajadores estadounidenses.
EE.UU. ha expresado sus quejas sobre la entrada de mercancía china a través de México y ha amenazado con llevar este asunto a la revisión del T-MEC prevista para 2026.