La gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama, en colaboración con Petróleos Mexicanos (Pemex), está gestionando proyectos estratégicos destinados a mejorar la autonomía de combustibles en el estado. Este esfuerzo tiene como objetivo atender la creciente demanda de combustibles y generar nuevas inversiones que incrementen la competitividad energética, comercial, turística e industrial en la región.

En una reciente reunión con Blanca Marisa Mendoza, subdirectora de Abasto de Combustibles de Pemex, y Eduardo Padilla Yebra, de Pemex Logística, se presentaron los proyectos TAD Cancún, TAD Chetumal y el Proyecto Punta Venado. Estas iniciativas buscan incrementar significativamente la capacidad de almacenamiento de combustibles en el estado, pasando de dos días a entre ocho y diez días de reserva. Este aumento triplicará la capacidad actual, garantizando el abasto de gasolina incluso ante contingencias hidrometeorológicas y contribuyendo a la reducción de los precios del combustible.

Los proyectos TAD Cancún y TAD Chetumal están diseñados para mejorar la infraestructura de almacenamiento y distribución de combustibles en dos de las principales ciudades del estado. Por su parte, el Proyecto Punta Venado se centrará en aumentar la capacidad de almacenamiento en una ubicación estratégica, reforzando la seguridad energética de toda la región.

Mara Lezama destacó la importancia de estos proyectos para el desarrollo económico del estado. “Estos esfuerzos no solo asegurarán un suministro constante de combustible, sino que también atraerán inversiones y generarán empleos, impulsando el crecimiento en sectores clave como el turismo y la industria”, afirmó la gobernadora.

La implementación de estos proyectos permitirá a Quintana Roo enfrentar con mayor eficacia cualquier interrupción en el suministro de combustibles, garantizando la estabilidad y sostenibilidad energética del estado. Además, la capacidad de mantener un suministro de combustible más prolongado ofrecerá una ventaja competitiva, atrayendo a inversores y fortaleciendo la economía local.

Blanca Marisa Mendoza, de Pemex, subrayó que “el aumento en la capacidad de almacenamiento permitirá no solo una mayor resiliencia ante posibles emergencias, sino también una optimización en la logística de distribución, lo que se traducirá en costos más bajos y precios más competitivos para los consumidores.”

Con estos proyectos, Quintana Roo da un paso significativo hacia la autonomía energética, fortaleciendo su infraestructura y preparándose para un futuro más próspero y sostenible.