Investigadores han descubierto que los restos encontrados en un entierro masivo subterráneo en el centro ceremonial de Chichén Itzá, hallado hace casi 60 años, pertenecen a 100 niños mayas sacrificados. El estudio, publicado en la revista Nature, revela que las víctimas eran hombres y, en su mayoría, estaban emparentados.

«Los análisis genéticos demostraron que todos los individuos examinados eran varones y varios de ellos estaban estrechamente relacionados, incluyendo dos pares de gemelos monocigóticos», indica el estudio.

Los científicos analizaron el genoma de 64 «subadultos» y encontraron que todos los restos pertenecían a varones que fueron enterrados durante un periodo de 500 años. Una cuarta parte de los individuos estaba estrechamente relacionada entre sí.

«En su mayoría, tenían entre 3 y 6 años. Dado que muchos de los individuos estaban relacionados hasta cierto punto, es probable que solo ciertas familias tuvieran acceso a este entierro, lo que representaba un gran honor», explican los investigadores.

Además, el análisis genético reveló que los niños sacrificados provenían de comunidades locales. Se encontró un linaje ancestral entre las muestras recolectadas y los habitantes actuales de la ciudad maya en Yucatán.

«Las poblaciones modernas tienen una mayor incidencia de genes relacionados con la resistencia a Salmonella enterica que los niños sacrificados, lo que apoya la hipótesis de que las epidemias introducidas durante el período colonial impulsaron el aumento de estos genes en la población», señalaron los autores del estudio.

Aunque el estudio sugiere que estas fosas estaban destinadas a las víctimas de sacrificios, no está claro cómo murieron las personas halladas en 1967.

«Al estudiar los huesos, no encontramos signos de trauma, por lo que no fueron arrojados a la cámara», comentó Barquera, uno de los investigadores, añadiendo que un análisis más detallado podría determinar si fueron envenenados.

El propósito exacto del entierro en Chichén Itzá sigue siendo un misterio. Sin embargo, es posible que los sacrificios fueran una súplica a los dioses por mejores cosechas o lluvias.

La Importancia de los Gemelos en la Cultura Maya

El caso de los gemelos sacrificados podría tener su explicación en la mitología maya, donde los gemelos varones son significativos debido a una historia de héroes mellizos que fueron al inframundo para venerar a su padre.

«Los gemelos son especialmente auspiciosos en la mitología maya y el sacrificio de gemelos es un tema central en el sagrado Libro del Consejo maya k’iche’, el Popol Vuh», precisa el estudio.

En el Popol Vuh, los gemelos Hun Hunapu y Vucub Hunahpu descienden al inframundo y son sacrificados por los dioses tras su derrota en un juego de pelota. La historia continúa con la venganza de sus descendientes, los Héroes Gemelos Hunapu e Ixbalanqué, quienes burlan a los dioses del inframundo a través de sacrificios y resurrecciones.

El descubrimiento de un entierro masivo exclusivamente masculino sorprendió a los especialistas, ya que estos rituales generalmente incluían solo mujeres jóvenes o una mezcla de hombres y mujeres.

«Tradicionalmente, los entierros asociados a un entorno subterráneo suelen ser ofrendas de fertilidad», afirma Barquera. Los investigadores ahora planean realizar actividades de divulgación comunitaria con los lugareños para obtener más conocimientos sobre su cultura y patrimonio.

Este estudio abre nuevas puertas para entender los complejos rituales y la estructura social de los antiguos mayas, mientras se continúa investigando para desvelar los misterios que rodean estos sacrificios infantiles.