Todos los días, decenas de especies de animales corren furtivamente por los parajes de Boulder (Colorado) buscando comida o lugares de descanso. No es fácil verlos. No es lo habitual, pero los especialistas cuentan con la ayuda de las cámaras de observación. Estos dispositivos otorgan información sobre sus movimientos o hábitos.
El personal de Espacios Abiertos y Parques de Montaña (OSMP, por sus siglas en inglés) de la ciudad de Boulder puede seguir a estos animales gracias a un sistema de nueve cámaras de detección de movimiento que capturan instantáneas y videos de forma pasiva de los animales que residen en su estado natural. Pero alguno le ha cogido el gusto a la cámara y ha aprovechado para hacerse unos 400 selfies.
Oso se roba una cámara y se toma 400 selfies
Un oso se salió del guion: se paró delante de uno de estos dispositivos y posó durante un buen rato. De las 580 fotos capturadas el pasado mes de noviembre, 400 eran instantáneas de este oso, que se ha vuelto viral por sus adorables selfies, según las autoridades locales. Se ha ganado hasta un apodo, el de Selfie Bear.
Las autoridades de la zona han aprovechado el episodio de este oso para explicar para qué sirven estas cámaras y cómo funcionan. “Las cámaras de detección de movimiento nos brindan una oportunidad única de aprender más sobre cómo las especies locales usan el paisaje que nos rodea mientras minimizamos nuestra presencia en hábitats sensibles”, señala Will Keeley, ecólogo senior de vida silvestre de Open Space and Mountain Parks.